A la Rana Chesca se el acumula el trabajo, se pasa el día recuperando los objetos que a los habitantes del castillo les caen por la ventana. Todos van a parar al estanque donde vive Chesca, así que no tiene más remedio que recoger los objetos y devolvérselos a sus dueños. La princesa siempre pierde su bola dorada, al cocinero se le ha caído una col, el brujo busca su bola de cristal, la sirvienta no encuentra su ovillo y sólo la rana Chesca con vuestra ayuda puede recuperarlo todo. Pero los postigos de las ventanas están cerrados y debemos encontrar al habitante correspondiente antes de empezar a escalar por el escarpado muro del castillo. Es un juego de mesa de cooperación que también puede jugarse en solitario. Potencia el desarrollo de las habilidades de motricidad fina, la coordinación ojo mano y la memoria. El castillo 3D lo montamos sobre la base de la caja del juego